Hábitos de trabajo ergonómicos: buenas y malas prácticas.

La resistencia al cambio es connatural al ser humano pese a que, paradójicamente, el cambio es constante en las personas. Nos encontramos en la era de la información en la que algunos paradigmas del siglo XX que venimos arrastrando no nos sirven, y por ello es preciso modificarlos. Veamos este aspecto trasladado al ámbito de la ergonomía.

A diario llevamos a cabo actividades, tanto en el trabajo como fuera de él, que no siempre responden a criterios de ergonomía y economía de esfuerzo sino que son fruto de la costumbre. Incluso sabiendo cuáles son las posturas menos lesivas o los gestos más adecuados, a diario realizamos acciones alejadas de las recomendaciones ergonómicas.

Y no debemos perder de vista que el tiempo que dedicamos al trabajo supera a la mayor parte del resto de las actividades diarias por lo que, determinados hábitos posturales o gestos adquiridos pueden resultar lesivos si se instauran en nuestra forma de trabajar diaria.

Ejemplos de malas prácticas ergonómicas en el trabajo

Veamos un ejemplo:

En este caso, el hábito de mantener los papeles frente al teclado, amplía la distancia al mismo generando mayor tensión en la musculatura del hombro y cuello al no apoyar el brazo izquierdo en la mesa. 

Por otra parte, el uso del ratón sin apoyo del antebrazo, provoca una zona de compresión en la muñeca con el borde de la mesa que puede relacionarse con la aparición de molestias.

¿Y este otro?

Desplazarse por el almacén arrastrando una transpaleta vacía no tendría que suponer mayor problema, pero si nuestro hábito es hacerlo con una extensión de la articulación del hombro, llevando el brazo hacia atrás en su rango máximo, podrán aparecer molestias y lesiones como las tendinopatías de hombro.

En los dos ejemplos anteriores podemos observar que los aspectos que pueden desencadenar molestias o futuras lesiones en las personas trabajadoras pueden estar asociados a gestos individuales o hábitos personales: no estarían exclusivamente determinados por la tarea sino por la forma en la que ésta que se realiza.

Los trastornos musculoesqueléticos atribuibles a factores ergonómicos que tienen que ver con una mala postura o con un hábito inadecuado en el puesto de trabajo tienen la particularidad de ser sutiles y pasar desapercibidos a los ojos de una persona observadora no experimentada. Pero, indudablemente están presentes en el día a día de todas las actividades laborales.

En los dos ejemplos anteriores podemos observar que los aspectos que pueden desencadenar molestias o futuras lesiones en las personas trabajadoras pueden estar asociados a gestos individuales o hábitos personales: no estarían exclusivamente determinados por la tarea sino por la forma en la ésta que se realiza.

Los trastornos musculoesqueléticos atribuibles a factores ergonómicos que tienen que ver con una mala postura o con un hábito inadecuado en el puesto de trabajo tienen la particularidad de ser sutiles y pasar desapercibidos a los ojos de una persona observadora no experimentada. Pero, indudablemente están presentes en el día a día de todas las actividades laborales.

Fruto de esa necesidad el INSST publicó la Guía de actuación para la implantación de comportamientos seguros y saludables generadores de Cultura preventiva y de Excelencia con la intención de incidir en la posibilidad de “evolucionar de la obligación, supervisión y control al compromiso, la confianza y el liderazgo” como pilares para alcanzar la excelencia.

Buenas prácticas ergonómicas en el trabajo

Y ¿qué se consideraría una buena práctica en esta línea? Algunas de las características que la definirían son las siguientes:

1. Se trata de una experiencia exitosa que se identifica a través de una acción, (forma óptima de ejecutar un proceso) refiriéndose a hechos evidenciables y no a intenciones sobre Seguridad y Salud.
2. Es algo práctico, aplicado, que impacta de forma palpable y tangible en la mejora de la vida de las personas.
3. Para algunos puede ser norma o modelo, para otros sólo ejemplos o referentes.
4. Tiene efecto multiplicador, es decir, puede ser replicado o adaptado según las circunstancias y protagonistas implicados como Dirección, Mandos intermedios, Operadores de línea, Representantes legales de los trabajadores, Proveedores, Clientes, etc.
5. Introduce nuevos elementos o mejora los existentes a objeto de perfeccionar su funcionamiento interno y su relación con el entorno, que se ve altamente beneficiado.
6. Responde a una necesidad identificada en materia preventiva, fruto de una evaluación cuidadosa de alguna característica, proceso, comportamiento o actitud que se hace necesario modificar y mejorar y, por tanto, tiene objetivo definido, pertinente y realista.

¿Conoces nuestros Programas Ergo4U© y ERGO-Coach Vítaly?

En la Guía del INSST se indican cuatro grandes bloques de desarrollo de iniciativas, siendo una de ellas la que tiene que ver directamente con las Buenas Prácticas vinculadas con la Formación y Desarrollo de las personas trabajadoras.

• Programa Ergo4U©

Nuestro programa avanzado de intervención ergonómica Ergo4U© está basado en metodologías específicas de Seguridad Basada en el Comportamiento (SBC) para motivar el cambio hacia comportamientos seguros y en técnicas de ergonomía participativa en las que los trabajadores colaboran activamente en la identificación de riesgos y en las propuestas para la eliminación y control de los mismos.

• ERGO-Coach Vítaly

El programa ERGO-Coach Vítaly unifica la prevención de riesgos laborales con la supervisión ergonómica con un enfoque basado en la ergomotricidad. Las sesiones de ERGO-Coach Vítaly incluyen una parte de identificación de los gestos que pueden representar mayor carga estática y dinámica en las diferentes zonas del cuerpo, y otra parte práctica en la que se incide en la incorporación de los gestos motrices más adecuados por puesto, de forma individualizada.

El éxito de nuestras intervenciones en Ergonomía Conductual y Ergomotricidad a organizaciones de cualquier sector de actividad nos avalan.

Silvia Mallor

Dirección Técnica del Área de Ergonomía

Vítaly